EL CHULO SE QUEDÓ SIN GLORIA

A pesar de haber conseguido que Instituto vuelva a la máxima categoría del fútbol argentino, los méritos, para los tiempos de hoy, no parecen ser los suficientes. Por eso, Rivoira renució a su cargo.
La Gloria la tenía Rivoira luego de conseguir el ansiado ascenso a la Primera. A pesar de algunos refuerzos que trajo el técnico, el equipo nunca pudo encontrar una regularidad en el arranque del torneo. La típica frase de: "es lo mejor para la institución", invadió la escena. Por eso, un tipo que quiere mucho al club y también es querido por sus hinchas, no pudo terminar su ciclo como hubiera querido. En su reemplazo aparece la figura del "Gordo" Luis Garisto, quien dirigió por última vez a Chacarita con una pobre producción.
Será un nuevo capítulo en la historia del club. El tiempo dirá si Garisto puede entrar en la Gloria de Instituto como así alguna vez lo consiguió Rivoira.