SI TRATÁS EL TEMA DE LA DEUDA, HAY QUE HACERLO A FONDO

Ahora Sergio Marchi dice que no va a arrancar el torneo el equipo que deba sueldos a partir de diciembre. Quiero pedir un poco más de seriedad. Estoy cansado de escuchar que Agremiados se mueve, que la AFA se reúne, que los capitanes discuten y sigue siendo siempre lo mismo. No es serio. Este es el camino de la debacle de nuestro fútbol, que está en crisis hace varios años y mientras la pelota siga rodando o no haya una bajada de línea clara, seguirá siendo todo igual. ¿Quieren poner al día los clubes? ¿Por qué no los persiguen como hacen con cada persona que deja de pagar sus impuestos o deudas? Yo si dejo de pagar el cable, me lo cortan. Si dejo de pagar el alquiler, me echan de mi hogar. Si dejo de pagarle al Banco una deuda, me mete en el Veraz y la gente de Cobranzas (o en su defecto un estudio jurídico) que se encargará de cobrarme. Pero claro, la mancha me va a inhibir para ciertas movidas financieras que quiera hacer en el futuro.
Pretendo que se deje la mentira de lado. Esto hay que arreglarlo de raíz. Sabido a es que los clubes están devastados económicamente y algunos son deficitarios. Entonces busquemos la manera de sanearlos y que paguen lo que corresponde. El problema es que la AFA, bajo el mandato de este presidente, bancó a muchos clubes creando un verdadero problema.
Lo que deberían hacer es que todos los clubes que deban plata, no puedan gastar dinero en incorporaciones. Es decir, solamente podrán firmar contratos con jugadores en condición de libres. Entonces, dedicarían más esfuerzo a sacar jugadores de las inferiores, a disfrutarlos y explotarlos más para que nuestras selecciones juveniles tengan mayores frutos y sigamos siendo un producto de exportación. A medida de que se van vendiendo jugadores, se va cancelando la deuda. Una vez que se llega a números positivos, ahí sí podrá operar como cualquier club del mundo. Se termina con eso de que en cada libro de pases llegan 20 jugadores y se van otros 20. Empecemos con los proyectos serios y eso se acompaña desde la dirigencia en bancar los contratos hasta los encargados del circo de bajar una línea como ésta. Cada club deberá aprovechar y exprimir al mango su patrimonio. También se acaban los muchos negociados que existen porque permitiría por lo menos blanquear por un tiempo algunos traspasos que antes eran dudosos ya que deberán negociar directamente el jugador dueño de su pase con el club interesado sin intermediarios. Hay medidas que pueden ser antipopulares pero necesarias para volver a tener un fútbol atractivo y sano.